jueves, 9 de abril de 2009

Tutoría On Line: Teoría y Práctica

En este pequeño artículo pretendo reflexionar sobre dos líneas propuestas en el módulo B de la Maestría en eLearning de la USAL: reflexiones en torno al tutor on line y la figura del tutor en prácticas: aprendizaje en el ejercicio de un rol.

En primer lugar, es necesario afirmar la importancia del Tutor On Line (TOL) como un elemento indispensable para el éxito de la formación virtual. Luego de años de experiencia de tantos teóricos sobre la materia, y rescatando también la poca experiencia sobre este campo de quien escribe, se concluye que el gran error de muchos, constituyéndose en el fracaso verdadero de tantos cursos on line, ha sido prescindir de la figura del tutor y dejar la mayor responsabilidad del proceso de enseñanza on line tanto a los medios virtuales como a las comunidades de aprendizaje (cfr. Soane Pardo y García Peñalvo, 2008). Ciertamente son elementos indispensables los anteriormente mencionados, pero deben conformar un trípode entre sí para lograr el equilibrio requerido, recayendo la responsabilidad de ser el motor del proceso sobre el TOL.

Pero, ¿quién es el TOL? Para crearnos un perfil adecuado del TOL y llegar a tener un norte hacia el cual caminar en nuestro proceso, debemos definir a este personaje como un acompañante en el caminar de los alumnos, el cual puede ser o no un experto en la materia, pero lo más importante es que sea una persona capaz de hacer las preguntas adecuadas en el momento preciso para que el estudiante alcance el conocimiento.

Un TOL debe ser capaz de tener una presencia directiva en una primera instancia, para luego dejar la batuta a otro e irse diluyendo en el proceso sin dejar de lado la responsabilidad de conducir el grupo a una toma de decisiones y conclusiones importante para el proceso de aprendizaje (Cfr. Soane Pardo y García Peñalvo, 2008; Jerónimo Montes, 2008).

Puesto que el eLearning ha asumido a lo largo de su historia el paradigma constructivista, se encuentra que el TOL tiene como tarea primordial la creación con sus estudiantes de una Comunidad de Aprendizaje, también llamada Comunidad de Práctica. Para realizar su tarea con éxito, el TOL debe trabajar los siguientes aspectos señalados tanto por Jerónimo Montes (2008) y Díez Fernández (2007):
  • Pertenencia: consiste en que cada miembro de la Comunidad se sienta parte de la misma. Para ello es importante que todos se conozcan y exista una integracción que vaya más allá del simple estudio;
  • Influencia: al compartir los hallazgos de cada uno, los propios presupuestos son cuestionados y se ejerce interacción de incidencia entre todos los miembros;
  • Integración y satisfacción: fenómeno que se da al encontrar respuesta a los intereses personales en la comunidad en formación;
  • Conexión emotiva: creada al ser los educandos copartícipes de una misma historia desarrollada en común.
De esta manera, el TOL se convierte en un gestor de Comunidades de aprendizaje y en un factor primordial del eLearning.

Otra tarea fundamental del TOL es la elección y correcta utilización de las herramientas técnicas a ser utilizadas en el diseño del curso impartido. Ciertamente, son muchas las posibilidades que brindan las plataformas de eLearning, pero no siempre el uso de las herramientas es el más correcto para determinados grupos. En ese sentido, la animación de foros es esencial, ya sean foros de trabajo o de socialización (Cfr. Bosom Nieto y Fernández Recio, s/f); allí, el tutor debe ser el promotor de la participación de todos los estudiantes. También debe estar al tanto de las nuevas tecnologías y utilizar las diferentes herramientas de la web 2.0 para comprometer al estudiante con la tarea formativa. Según Díez Fernández (2007) se deben dar los siguientes pasos para lograr ese compromiso:
  • Poner en relación: es la habilidad para aprovechar los aportes de todos los participantes e incentivar a lograr la sinergia;
  • Desarrollar la capacidad creativa: mediante proyectos aplicados por los estudiantes, resolviendo problemas;
  • Objetivo no académico: mediante el cual se ve la aplicación práctica de lo aprendido.
Podríamos seguir profundizando en la propuesta teórica del TOL, pero preferimos detenernos aquí para dar espacio a la experiencia.

Para facilitar la formación, se presenta la figura del tutor en prácticas (cfr. Bosom Nieto y Fernández Recio). Esta figura, importante en el desarrollo del proceso enseñanza aprendizaje, es un estudiante encargado de realizar las tareas del TOL con sus pares. Claro, siempre será monitoreado por el docente, quien seguirá de cerca los pasos de este estudiante.

El Tutor en Prácticas (TP) tiene como tarea principal llegar a acuerdos y logros intelectuales, partiendo de la generación de ideas y pasando por la co-construcción de ideas (Jerónimo Montes, 2008). También será la persona que se irá entrenando para liderar trabajos en el área de aprendizaje.

Desde la experiencia, ser TP es enriquecedor. Sin embargo, surgen algunas dificultades con las cuales no se cuentan en un primer momento, como pueden ser la falta de dominio de la materia, al ser estudiante no se ha dispuesto del tiempo necesario para ser TP (ciertamente el tiempo del TOL invertido en el curso parece ser mucho mayor que el del estudiante).

Pero también se van desarrollando algunos aspectos esenciales como lo son adquirir destrezas de liderazgo en trabajo on line, conocimiento de las herramientas y estrategias que pueden ser usadas con la web 2.0 para la integracción de equipos virtuales y otras muchas más.

En conclusión, la apuesta realizada por la USAL de formar profesionales en eLearning a partir de la práctica de tutorías, es acertada en cuanto el docente acompaña al TP a convertirse en un verdadero TOL, lo que se da tanto por el modelaje como por la práctica.

Referencias:
  • BOSOM NIETO, A. y FERNÁNDEZ RECIO, E. (s/f), Espacios de interacción en los cursos de eLearning, Grupo de Investigación Grial, USAL, España.
  • DÍEZ FERNÁNDEZ, O. (2007), El Reto de la Nueva Educación a Distancia: Enseñar a los Alumnos a Aprender en Red, en Aprendizaje en Red, en busca de la Comunidad Virtual, UNAM-FESZ, México.
  • JERÓNIMO MONTES, J.A. (2008), El Diseño Educativo, el Tutor y la Comunidad en Red en Construyendo la Comunidad de Aprendizaje en Red, una experiencia, UNAM, México.
  • SEOANE PARDO, A.M. y GARCÍA PEÑALVO, F.J. (2008), La Función Tutorial desde la Antigüedad hasta nuestros días: Fundamentos Filsóficos y Modelos Clásicos de Monitorización para su Aplicación a Contextos de E-Learning, en La Comunidad de Aprendizaje en Red, los retos para consolidarla, UNAM, México.

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